Salut invita a todas las mujeres de 50 a 69 años a que se sometan a una mamografía cada dos años

Imagen de archivo de una mamografía realizada en el hospital Vall d’Hebron (
El programa de cribado de cáncer de mama está en boca de todos a raíz del caso, que ha hecho saltar todas las alarmas, del retraso por parte de la Consejería de Salud de Andalucía en la realización de pruebas complementarias a mujeres cuya primera mamografía presentaba alguna lesión. Pero, ¿cómo funciona este programa?
✚ ¿En qué consiste?
Según expone el Departament de Salut a través de su web, la detección precoz -también llamada cribado- permite detectar el cáncer de mama en una etapa muy inicial, cuando todavía no se puede notar ni produce molestias y cuando la posibilidad de curación es mayor. En este sentido, la mamografía puede detectar precozmente un cáncer existente, pero no evita que una mujer pueda tener un cáncer de mama, precisa el Departament.
✚ ¿Quién puede participar?
En Catalunya, el programa de detección precoz invita a todas las mujeres de 50 a 69 años a que se realicen una mamografía (radiografía de las mamas) cada dos años. Y decimos en Catalunya porque “los criterios de cribado no son idénticos en toda España”, subraya la doctora Maria Vidal, jefa de la unidad de cáncer de mama del hospital Clínic.
“Aquí, por ejemplo, está abierto a mujeres de 50 a 69 años y cada dos años, mientras en Andalucía o la Comunitat Valenciana se convoca a partir de los 45. En Catalunya, actualmente, se está revisando la posibilidad de aumentar el rango de edad, tanto por debajo como por encima. Es decir, convocar a partir de los 45 años y seguir haciendo mamografías de los 70 a los 75 años, donde hay una incidencia muy elevada en una edad en la que muchas personas todavía tienen una buena calidad de vida”, añade.
✚ Carta de comunicación
La invitación se realiza mediante una carta nominal que reciben todas las mujeres que cumplen los criterios de edad. La primera carta les llega entre los 50 y los 52 años. La misiva detalla el día, hora y lugar reservados para realizar la prueba. Se puede cambiar la hora o la fecha llamando a la oficina técnica correspondiente (el teléfono aparece en la carta de invitación).
✚ ¿Cómo es la prueba?
Consiste en la realización de dos radiografías (una desde arriba y otra desde el lado) de cada seno. Para obtener una buena imagen con mínima radiación, es necesaria una buena compresión del pecho que puede ser molesta e incluso causar dolor en algunas mujeres. Todo el procedimiento dura menos de media hora. A fin de asegurar una mejor detección, las mamografías las analizan dos radiólogos por separado. Tanto la mamografía como todos los estudios y pruebas que se puedan derivar son gratuitos.
✚ ¿Y el número de positivos?
En la mayoría de casos (94% de las participantes), el resultado de la mamografía indica normalidad o hallazgo de una alteración claramente benigna y se comunica por carta directamente a la interesada. En esa misiva también se informa de cuándo se la volverá a convocar al cabo de 2 años.
✚ ¿Y si se detecta alguna lesión?
En unos pocos casos (en 60 de cada 1.000 mujeres), el resultado de la mamografía es dudoso y será necesario realizar alguna prueba adicional, que puede ser otra mamografía, una ecografía y, menos frecuentemente, una biopsia mediante punción con aguja o una biopsia quirúrgica. El centro donde se ha realizado la mamografía se pondrá en contacto con la participante para programar las pruebas necesarias.
En la gran mayoría de casos, estos estudios descartan la existencia de neoplasia. Sólo a 5 de esas 60 mujeres se les diagnosticará un cáncer.
✚ Tiempos de espera
“En Catalunya –arguye la doctora Vidal– se considera que el tiempo máximo desde que el profesional sanitario determina que hay que hacer una prueba complementaria y esta se realiza, tendría que ser de tres semanas. Si un 80% de las pruebas están hechas en menos de tres semanas, se considera que el programa está funcionando bien”.
✚ ¿Por qué se hace cada dos años la mamografía?
“Los programas de cribado consideran que es un plazo razonable en la gran mayoría de mujeres”, esgrime Vidal. Es decir, se estima que si en la primera mamografía no se ha visto nada, dos años después los médicos tendrían tiempo de reaccionar de manera eficaz, en una mayoría de casos, de haber aparecido algo. En un pequeño número de mujeres, la cita para la realización de la prueba es a los 6 o 12 meses para hacer seguimiento de alguna alteración benigna detectada.
✚ ¿Y si la interesada nota algo durante el periodo de espera?
Si antes de la siguiente convocatoria la interesada nota alguna anomalía en alguno de los senos, debe consultar al médico de cabecera o al ginecólogo. Los síntomas más comunes son: menos movilidad en una de las mamas cuando se levantan los brazos; aparición de un nódulo en la axila; cambio de tamaño de alguna de las mamas; irregularidades en el contorno del pecho; alteraciones en la piel de la mama: cambios de color, piel de naranja; cambios en el pezón: retracción, secreción de fluido; aparición de un nódulo en el seno que previamente no estaba.
✚ ¿Qué pasa si se detecta un cáncer?
Un equipo de especialistas indicará los estudios necesarios y propondrá el tratamiento más adecuado en cada caso, en función de las características de la mujer y las del tumor detectado.
✚ Cáncer de mama no invasor
En 1 de cada 6 mujeres en las que se detecta un tumor en el cribado se diagnosticará un cáncer no invasor, también llamado carcinoma in situ. Las células anormales están localizadas en el interior de los conductos mamarios y no se han propagado en otras zonas. En algunas mujeres, estas células cancerosas pueden permanecer en el interior de los conductos. En otras, pueden crecer y extenderse al resto del pecho en el futuro. Los médicos, actualmente, no pueden predecir si un cáncer no invasor se propagará por el pecho o no.
✚ Cáncer de mama invasor
En 5 de cada 6 mujeres en las que se detecta un tumor en el cribado se diagnosticará un cáncer invasor. Se trata de un tumor en el que las células cancerosas han traspasado el conducto e invadido el tejido de alrededor. La mayoría de cánceres invasores se propagan a otras zonas del cuerpo si no se tratan. El tratamiento del cáncer de mama invasor o no invasor puede incluir cirugía con extirpación sólo del tumor (cirugía conservadora del pecho) o con extirpación de toda la mama (mastectomía), radioterapia, hormonoterapia y/o quimioterapia.
La mayoría de cánceres que se diagnostican en programas de detección precoz se encuentran en fases muy iniciales, son de pequeño tamaño, están localizados en el pecho y no suelen afectar a otros órganos.
✚ La mamografía, ¿es infalible?
“No. Hay un porcentaje de tumores que, por decirlo de una manera simplista, son transparentes a la mamografía y sí se detectarían con una ecografía”, explica la doctora Vidal. “Pero en principio -continúa- no está justificado para la población general usar la ecografía como técnica de cribado, al menos a día de hoy. Sí que es verdad que están apareciendo nuevas técnicas, como la mamografía en contraste, para mamas más específicas, más densas”.
✚ Beneficios y efectos adversos de la detección precoz
Los programas de detección precoz están bien implantados en la mayoría de países desarrollados. Su objetivo fundamental es detectar la enfermedad de forma precoz y poder contribuir a reducir la mortalidad. Sin embargo, debe tenerse en cuenta que aunque la detección precoz aporta beneficios, también puede comportar algunos efectos adversos, advierte Salut.
✚ Beneficios
Los beneficios se darán en aquellas mujeres en las que la enfermedad haya podido detectarse en fase inicial, antes de presentarse clínicamente (antes de notarse). La mayoría de los cánceres diagnosticados en el programa se encuentran en estadios iniciales de la enfermedad (el tumor está localizado en la mama y es de pequeño tamaño), esto hace que se disponga de más opciones terapéuticas, especialmente de las menos agresivas y permite aplicar el tratamiento de forma precoz, lo que aumenta la probabilidad de curación y acelera la recuperación.
En el programa de Catalunya, uno de cada tres cánceres detectados tiene un tamaño inferior a 10 mm de diámetro.
✚ La detección precoz reduce la mortalidad
Desde principios de los 90, la mortalidad por cáncer de mama en Catalunya ha ido disminuyendo gracias a la detección precoz de la enfermedad y a los avances en los tratamientos. Existe evidencia suficiente de que la detección precoz del cáncer de mama mediante mamografía en mujeres de 50 a 69 años reduce la mortalidad.
A su vez, hay cierta controversia sobre el número de muertes evitadas con el cribado. Las cifras que proporcionan las mejores estimaciones, basadas en los estudios científicos, hablan de que por cada 1.000 mujeres invitadas al programa, se evitan 5 muertes por cáncer de mama. Se considera que en las mujeres que se realizan mamografías regularmente durante todo el período este beneficio es superior.
✚ La cirugía conservadora de la mama es posible
Detectar tumores de pequeño tamaño permite aplicar tratamientos menos agresivos. En ese sentido, se gana calidad de vida y disminuye el impacto psicológico del tratamiento. La mayoría de mujeres pueden tratarse con cirugía conservadora de la mama (extirpación del tumor o tumorectomía) y evitar así la extirpación de todo el pecho (mastectomía). En el programa de Catalunya, la cirugía conservadora se lleva a cabo en más del 80% de los casos diagnosticados.
✚ Efectos adversos
Algunos cánceres que se detectan nunca habrían provocado problemas para la salud de la mujer. La mamografía puede diagnosticar algunos tipos de cáncer de mama de crecimiento tan lento o de lesiones precancerosas (carcinoma in situ) que nunca habrían llegado a poner en peligro la vida de la afectada. Pero como, con los conocimientos actuales, no se puede saber qué cánceres van a progresar y cuáles no, se tratan todos. Esto puede comportar recibir tratamientos que no hubieran sido necesarios y sufrir sus efectos secundarios.
Este es el efecto conocido como sobrediagnóstico y sobretratamiento y es uno de los principales problemas de la detección precoz del cáncer, y de los más difíciles de cuantificar.
Se calcula que por cada 1.000 mujeres que se hacen mamografías de los 50 a los 69 años, entre 5 y 10 pueden ser diagnosticadas de algún tipo de cáncer de mama o lesiones precancerígenas que nunca habrían puesto en peligro su vida.
✚ Efecto de la radiación
Cualquier radiografía y, por tanto, cualquier mamografía, implica radiación. La mamografía requiere dosis muy bajas y, además, la mejora continua de las características técnicas de los nuevos equipamientos y los controles de calidad hacen que este riesgo potencial sea cada vez menor.
El riesgo de un cáncer provocado por la radiación de las mamografías hechas cada 2 años de los 50 a los 69 años -asevera Salut- es muy pequeño, disminuye con la edad y es particularmente bajo después de la menopausia. Se considera que los beneficios de la detección precoz superan el riesgo de radiación.
✚ La decisión de participar
Hoy por hoy, las posibilidades de prevenir el cáncer de mama son limitadas, por lo que es importante intentar diagnosticarlo a tiempo. El Departament de Salut, siguiendo las recomendaciones de diversos organismos internacionales, invita a las mujeres de entre 50 a 69 años a realizarse una mamografía cada 2 años. Sin embargo, la decisión final de participar o no es de cada mujer después de valorar los beneficios y efectos no deseados que comporta la detección precoz.
En caso de decidir no participar, recibirá una nueva invitación a los dos años excepto si explícitamente informa que no quiere ser invitada de nuevo. “Todas las mujeres que reciben la carta tendrían que someterse al cribado”, recomienda la doctora Vidal.